Parece que con la llegada de Florentino la euforia se ha extendido en el madridismo hasta un punto que roza lo increíble. Se empiezan oír en la calle comentarios del estilo de “el año que viene el triplete en Madrid”, “se acerca la Décima”, “que tiemble el Barça”, y un largo etcétera de comentarios optimistas, demasiado optimistas diría yo.
No dudo que el Madrid va a tener unos jugadorazos el año que viene, pero jugadorazos no son iguales a equipazo. Para mi a los blancos les va a costar una o dos temporadas como mínimo ponerse al nivel del Barcelona como equipo.
Y el gran perjudicado de todo esto sin duda va a ser Pellegrini, que si no hay cierta serenidad por parte de la directiva, será cesado si hay malos resultados. Lo lógico sería que Valdano, desde su sabiduría futbolística, mantuviese al chileno a toda costa y le dejara convertir al elenco de estrellas en un equipo, porque si consigue esto, no hay duda de que la alegría va a volver a la casa blanca.
Tampoco se puede olvidar tan rápido la gran temporada del Barcelona, que no se lo va a poner fácil al resto de los equipos. Sin duda el Madrid va a mejorar, pero sería inteligente tranquilizar a la afición y exponer el proyecto a largo plazo que debe tener el club más grande de todos los tiempos.
Esta temporada el Bernabéu sin duda va a ver goles de esos que levantan pancartas, jugadas increíbles, grandes estrellas, pero aun falta para ver un equipo totalmente madurado y en plena forma. Pero ya tienen todos los alimentos, y con calma y buen alimento todo se consigue.
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